Las víctimas de pederastia, representadas por Brave Movement (Somos valientes, movimientos para poner fin a la violencia sexual en la infancia) se han reunido este martes, con tres de sus representantes, en las puertas del Congreso para reclamar que el Gobierno “deje de paralizar” la ley sobre imprescriptibilidad de los delitos sexuales a menores.
El Congreso aprobó hace diez meses estudiar un cambio legislativo que ya existe en países como Bélgica, Holanda, Suiza y Suecia, informa El País.
Noticia completa El País