Varios especialistas analizan cómo esquivar este contenido y qué repercusiones puede tener a una temprana edad.
Para evitar un uso indiscriminado en estas fechas estivales en las que hay más tiempo libre y más acceso a internet, Leire Lasuen, formadora y pedagoga de PantallasAmigas, recomienda la utilización de programas y sistemas de control parental que «cada vez son más completos, útiles y, además, los hay gratuitos o de pago».
El acceso a internet es una constante en la vida diaria de la que difícilmente se puede escapar. Los niños no son una excepción. Están rodeados de pantallas y su uso continuado e incontrolado puede favorecer a que accedan a información que, por su corta edad, perjudique su mente y desarrollo como personas. Es el caso de la pornografía.
Para evitar un uso indiscriminado en estas fechas estivales en las que hay más tiempo libre y más acceso a internet, Leire Lasuen, formadora y pedagoga de PantallasAmigas, recomienda la utilización de programas y sistemas de control parental que «cada vez son más completos, útiles y, además, los hay gratuitos o de pago». Aún así, aconseja consultar este asunto con familiares y amistades que tengan menores a cargo con los que nuestros hijos compartan tiempo porque «muchas veces lo que en casa evitamos no tiene límites en casas ajenas, por lo que podrían acceder a pornografía por la falta de control parental».
Pía García, responsable de comunicación de Empantallados, apunta que para que los niños no estén tanto tiempo con las tecnologías, «a algunas familias les funciona tener programadas actividades “off line” durante el día y asignar algunas tareas a realizar antes de usar las pantallas». También considera muy positivo que sean «pactados previamente con los hijos unos límites y normas en torno al uso».
Por su parte, Jorge Gutiérrez, secretario de la asociación Dale Una Vuelta, destaca que «antes tenías que ir a ver porno, ahora viene a ti. Hasta no hace mucho había que pagar por ver pornografía; mientras que, actualmente, casi hay que pagar por no verla» y recalca que «el porno es «fake», pero sus efectos son reales», refiriéndose a los casos de adictos a la pornografía.
Consecuencias de ver pornografía tan pronto
La pedagoga de Pantallas Amigas alerta de que ver pornografía a corta edad «condicionaría gravemente la educación afectivo-sexual de los pequeños debido a que quedaría reducida a la genitalidad, además del riesgo de que puedan asumir patrones machistas presentes con frecuencia en este contexto».